Schneider Electric cumple 75 años contribuyendo a la construcción sostenible en México. En el país, da trabajo a más de 12 mil personas y aporta soluciones para más de 50 mil clientes de pequeñas, medianas y grandes empresas en su camino a la transformación digital. Actualmente, la empresa contempla a la fabricación ecológica como una alternativa para buscar el crecimiento económico sin generar degradación ambiental.
Mediante innovaciones tecnológicas, el Internet Industrial de las Cosas y el uso de materiales de bajo carbono; los negocios pueden caminar hacia la descarbonización y la optimización del uso de energía. Este es el planteamiento de Jean-Pascal Tricorie, CEO de Schneider Electric.
En su texto “Sostenibilidad para el crecimiento: por qué la fabricación verde es crucial para un futuro con bajas emisiones de carbono”, Jean-Pascal Tricoire plantea que una de las paradojas más apremiantes de la actualidad es buscar el crecimiento industrial sin dejar a un lado la consciencia por el impacto ambiental. Además, cita un informe de las Naciones Unidas; en el cual, para proteger al planeta, recomienda la reducción de las emisiones de CO2 a casi la mitad para 2030. Como consecuencia, señala, la fabricación ecológica es una tendencia industrial que aborda estos desafíos.
Este enfoque de fabricación, explica, consiste en modificar prácticas comerciales, de mentalidad y de fabricación para reducir el impacto industrial en el medio ambiente. Entre sus beneficios se encuentran la reducción de la huella de carbono y del uso de recursos naturales; además de una mayor eficiencia, resistencia y sostenibilidad y el ahorro de energía.
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Rumbo a este objetivo, comenta el CEO de Schneider Electric, la Cuarta Revolución Industrial y el Internet de las Cosas Industrial permiten generar innovaciones para extender el ciclo de vida de los productos y optimizar su uso. En este ámbito, Schneider Electric ofrece las soluciones EcoStruxure ™ para cadenas de suministro, las cuales permiten monitorear el uso de energía y emisiones de CO2.
“Verde no es una palabra hueca. Hay formas tangibles de impulsar prácticas sostenibles tanto dentro de las instalaciones de fabricación, a través de la cadena de suministro, como a través de la base de clientes”, comenta Jean-Pascal.
En su perspectiva, otra práctica para proteger el medio ambiente es, durante la fabricación, reemplazar materiales con alto uso de carbono por otros con menos uso. Además, plantea, las empresas deberían adoptar el etiquetado ecológico con el objetivo de guiar a los consumidores durante sus decisiones de compra.
Por otro lado, Jean-Pascal Tricoire considera que es posible reducir el costo de la descarbonización al limitar la demanda de transporte intensivo en carbono. Lo anterior se conseguiría mediante la innovación en procesos para generar mayor eficiencia. “Vemos un futuro brillante para la descarbonización de la energía”, comenta.