El precio de la onza de oro escaló el viernes a un nuevo máximo histórico, sobre la marca psicológica de los 2,500 dólares, catapultado nuevamente por las tensiones geopolíticas y la debilidad del dólar.
El temor a una escalada de las tensiones en Medio Oriente impulsó las compras de activos refugio. La noticia de un inminente ataque de Irán a Israel aumenta las coberturas de refugio.
Mientras tanto, el dólar se debilitó por as crecientes apuestas sobre un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal. Un ajuste de los tipos de interés estadounidenses hace que las inversiones en renta fija sean menos atractivas que el oro, porque el metal dorado no reduce los ingresos.
En este contexto, el contrato más activo del oro ganó 44.20 dólares, es decir 1.8%, para cerrar en un récord de 2,537.80 dólares la onza. En la semana se anotó una ganancia de 2.7%.
Bank of America estima que el precio del oro podría oscilar entre 2,500 y 2,600 dólares por onza en el segundo semestre de 2024. Mientras, Commerzbank estima que los precios del oro cerrarán el año sobre los 2,500 dólares. UBS augura que el precio del oro escalará hasta los 2,600 dólares para finales del año.
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Cabe señalar que el precio de la onza de oro experimentó una ganancia semestral de 13.40% en la primera mitad del 2024. La más amplia en un periodo similar desde 2020. En lo que va del año, el precio del oro suma una ganancia de 20%.
El oro es considerado un escudo financiero y un refugio de inversión en tiempos de crisis económicas y tensiones geopolíticas.
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