El precio de la onza de oro sumó el lunes su tercer récord sobre la marca simbólica de los 2,700 dólares en el mercado de futuros de Nueva York, impulsado por las crecientes tensiones en Medio Oriente y la volatilidad del dólar.
La incertidumbre en torno a las elecciones presidenciales de Estados Unidos y las relajadas expectativas de política monetaria continuaron empujando a los precios del oro a niveles récord.
Igualmente, los precios se beneficiaron del retroceso de los rendimientos de los bonos del Tesoro.
Las posibilidades de que la Fed se embarque en un agresivo ciclo de recortes de tasas de interés también están detrás de la escalada actual de precio del oro.
La onza de oro, que ha repuntado 32% en lo que va del año, acumula 41 jornadas sobre el nivel clave de los 2,500 dólares. Analistas esperan que el oro alcance la marca de los 3,000 dólares para el próximo año.
En este contexto, el contrato del oro ganó 0.3% para cerrar en 2,738.30 dólares, un precio sin predentes. El metal dorado, que en el tercer trimestre repuntó 14%, se enfila a su mayor ganancia anual desde 2010.
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Citi Research estima que el oro podría alcanzar el hito de 3,000 dólares para mediados de 2025, para cerrar sobre 2,700 dólares en este año.
Mientras, Goldman Sachs elevó la previsión anual del precio promedio del oro de 2,357 a 2,395 dólares, y de 2,686 a 2,973 dólares para 2025.
En tanto, Bank of America estima que el precio del oro podría oscilar entre 2,500 y 2,600 dólares por onza en el último trimestre de 2024. UBS aún augura que el precio del oro cerrará sobre los 2,600 dólares el año. Commerzbank, en tono más conservador, calcula que los precios del oro cerrarán el año sobre 2,500 dólares.
El metal dorado es considerado un escudo financiero y un refugio de inversión en tiempos de crisis económicas y tensiones geopolíticas.
