Por: Gustavo Álvarez
Sí la inclusión de género es un tema que se toma en serio en las empresas mineras en lo individual; ahora como gremio se da un paso adelante y se anuncia una nueva vicepresidenta en la Cámara Minera Mexicana. No podría ser más adecuado y merecido el encargo, Ana María González Herrera será la nueva VP de Inclusión Femenina; una mujer avalada por un trayectoria no menos impresionante que la tenacidad y el compromiso que al día de hoy mantiene como profesional de la minería.
Hace un par de días en el periódico Reforma se hizo el anuncio de parte del presidente de la Camimex, Jaime Gutierrez Núñez. El directivo Informó que Anita González actual presidenta de la Asociación de Mujeres en Minería WIM México se incorpora a la Cámara. Gutiérrez Núñez dijo que hasta ahora no existía un área en Camimex encargada específicamente de impulsar la inclusión de más talento femenino en el sector minero en México; donde el 16% se estima que son mujeres.
¿Quién es Ana María González?
Sobre Ana María González podemos decir que es primer caso documentado de una profesional en minería en México. Anita, como le conocemos en el gremio, recuerda que ella empezó a trabajar en campo desde antes que hubiera baños o habitaciones para mujeres en los campamentos. Pasó por varias empresas y llegó a ser country manager, el cargo más alto que hay en una minera extranjera; esto en Mine Finders Corporation en 1997, después pasó por Esperanza Resources, Argonaut Gold y Adularia Exploraciones.
Siempre se ha distinguido por un gran carácter, capacidad de organización y un talento nato para hablar y trabajar de frente con la gente; lo mismo en una comunidad rural, que en una mesa con directivos, gobernadores y secretarios de gabinete. Apenas este mismo año la podías ver a pie en la sierra de Guanajuato, en terrenos del Marro coordinando cursos de actividades productivas para mujeres; asi como entregando despensas y pipas de agua en ejidos donde aún no llega la red.
Queda clarísimo que el sector minero en México tiene buenos números en inclusión, y he visto en campo y en las unidades mineras cómo en realidad muchas mujeres ocupan roles para nada secundarios; tanto en espacios técnicos, cómo administrativos y de dirección, sin embargo sigue siendo un tema a tratar y con varios pendientes.