El presidente Andrés Manuel López Obrador externó su desacuerdo con la privatización de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En la mañanera, López Obrador dejo en claro que no está de acuerdo con la continuidad del modelo anterior, el cual fomentó la corrupción
López Obrador señaló que la experiencia del pasado mostró que la privatización fue sinónimo de corrupción, fue el pretexto para saquear y robar.
“No estoy de acuerdo en la privatización ni de Pemex ni de la industria eléctrica. No estoy de acuerdo en que continúe el modelo anterior, porque privatización se convirtió en sinónimo de corrupción”, reiteró.
El mandatario aprovechó para instruir al director de Pemex, Octavio Romero, y Roberto Salcedo, secretario de la Función Pública, a presentar un informe sobre presuntos casos de corrupción en la Subdirección de Proyectos de Exploración Estratégica de Pemex.
Recordó que, antes se despedía a los trabajadores operativos de Pemex, sindicalizados o transitorios, pero ahora se respetan a los trabajadores de base.
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Por otra parte, el mandatario anunció que en octubre de este año realizará su segundo recorrido de supervisión sobre el Tren Maya y en esta ocasión será de Cancún a Escárcega.
Resaltó que el Tren Maya es una de las obras públicas más importante del mundo. Porque no hay ninguna obra así, de esas dimensiones y “no es una obra grandota, sino grandiosa”.
Igualmente, el mandatario afirmó que hay 50 mil obreros trabajando en el Tren Maya y se terminará en diciembre de este año. A pesar de los problemas que enfrentaron, como de abasto de material, de protección a cenotes, de cambio de rutas para no afectar templos.
Informó que se entrevistará con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para tratar el tema de la integración comercial de América del Norte en el marco del T-MEC.